Viernes, 22 de junio de 2018

Han sido cuatro años de convivencia. Durante este tiempo hemos pasado muchas horas juntos y sin duda, hemos crecido personal y profesionalmente, en mi caso y espero que personal y académicamente en el vuestro.

Con estas palabras quiero contaros todo lo que me habéis aportado.

Inicié mi andadura profesional en el año 1997, han pasado muchos chicos y chicas por mi vida desde entonces, pero he de confesaros que vosotros y vosotras habéis sido muy especiales para mí.

Recuerdo cuando me asignaron la tutoría de tercero que vuestra maestra me dijo, “es un grupo muy trabajador y revoltoso en el aula”, yo tenía cierta idea de vosotros por las clases de E.F, pero intuía que teníais algo especial. A la vez, yo andaba inmerso en un proceso formativo de cambio metodológico, quería ser mejor maestro.

No sé si lo habré conseguido, pero os aseguro que cada proyecto nuevo que hemos trabajado me ilusionaba cada vez más por: vuestras respuestas, reflexiones, participaciones y entusiasmo.

Me gustaría explicaros cómo me siento con el éxito de vuestros resultados escolares, lo voy a hacer con un ejemplo. La alegría de un entrenador de fútbol no le viene por ganar él la copa o el campeonato, la alegría le viene por el éxito de su equipo en ese campeonato.

Quiero también dar las gracias a todos las madres y a algún que otro familiar, que me habéis ayudado. No sabéis lo importantes que habéis sido para mí, me sentía feliz cada vez que os veía entrando por la puerta para asistir a los Grupos Interactivos, a las Tertulias, a las excursiones, a colaborar en las tareas finales de algún que otro proyecto, al comprobar que os implicabais de manera activa en la educación de vuestros hijos e hijas, pero sobre todo, por haber acudido siempre que os llamaba para asistir a las tutorías, en ellas podíamos hablar y contrastar los distintos puntos de vista, que no siempre coincidían, pero afortunadamente siempre hemos llegado a acuerdos que sin duda beneficiaban a los verdaderos protagonistas del aula, que son estos niños y niñas.

Os deseo lo mejor en vuestra nueva etapa, los maestros y maestras de este colegio siempre os recibiremos con los brazos abiertos en esta gran familia que formamos el CEIP Andalucía.

MUCHAS GRACIAS Y "NUNCA DEJÉIS DE SOÑAR"

Y esto ha sido todo, ahora toca descansar, os lo habéis ganado y que la vida continúe. Espero que os sea favorable a todos y todas.

Ahora si que ya no hay tiempo para más.

SALUDOS Y PASAD UNA FELICES VACACIONES.